Hoy, 21 de octubre, conmemoramos el legado inmortal de una de las voces más icónicas y queridas en la historia de la música latina: Celia Cruz. Esta fecha nos brinda la oportunidad de rendir homenaje a la “Reina de la Salsa”, cuya pasión, carisma y talento dejaron una huella imborrable en el corazón de millones de personas en todo el mundo.
Por Reik
Celia Cruz, nacida en La Habana, Cuba, el 21 de octubre de 1925, comenzó su carrera en la música a una edad temprana y rápidamente se destacó por su voz excepcional y su energía en el escenario. Su vibrante personalidad y su estilo inconfundible la convirtieron en una verdadera embajadora de la cultura cubana y de la música latina en general.
A lo largo de su carrera, Celia Cruz lanzó una impresionante cantidad de álbumes, con éxitos como “La Vida es un Carnaval”, “Quimbara”, y “Azúcar”. Su colaboración con grandes artistas, como Tito Puente, Johnny Pacheco y Willie Colón, contribuyó a enriquecer la música salsa y a elevarla a nuevas alturas.
Pero Celia Cruz fue mucho más que una estrella de la música. Su compromiso con la justicia social y su apoyo a la comunidad latina la convirtieron en un modelo a seguir. Durante su exilio en los Estados Unidos, debido a la revolución cubana, Celia se convirtió en un símbolo de resistencia y esperanza para los exiliados y los amantes de la libertad.
Hoy, en el aniversario de su nacimiento, recordamos a Celia Cruz con admiración y gratitud por su contribución invaluable a la música y la cultura. Su legado perdura a través de su música, su pasión y su alegría contagiosa. Celia Cruz sigue siendo un faro de inspiración para generaciones futuras de artistas y amantes de la música latina.
Celebremos su vida y su música en este día especial, recordando su famosa frase: “¡Azúcar!” Celia Cruz, tu voz sigue vibrando en nuestros corazones y en las pistas de baile de todo el mundo.